SANTO DOMINGO.- El presidente de la Federación Nacional de Choferes (Fenacho), Alexis Francisco Disla, entregó este jueves al director del Instituto Nacional de Tránsito y Transporte Terrestre (Intrant), Milton Morrison, un proyecto sobre electromovilidad, el mismo tiene como objetivo incluir en el transporte público vehículos eléctricos, que contribuirán significativamente en la mejora del tránsito y el medioambiente.
“El Sistema de Movilidad del Transporte Colectivo de Pasajeros”, en autobuses eléctricos, es el primer paso hacia una electromovilidad urbana más eficiente y sostenible, que plantea, cómo se puede mejorar la movilidad en la ciudad, la transformación y modernización mediante la renovación y optimización de una red de autobuses eléctricos», refirió Disla.
Agregó que se hace necesario que el país se aboque a un proceso de reconfiguración en materia de tránsito y movilidad, ya que lo han hecho otros países del continente, al incluir vehículos eléctricos en su sistema de transporte público y los resultados han sido satisfactorios, esto contribuirá en una disminución sustancial del taponamiento y una menor contaminación.
Morrison valoró como positivo el proyecto, ya que contribuirá al desarrollo del tránsito y además a la disminución de dióxido de carbono que afecta el medioambiente.
El presidente de Fenacho, estuvo acompañado por una amplia representación de dicha federación, quienes también ofrecieron sus pareceres sobre la iniciativa y los beneficios que aportaría para el país y la ciudadanía.
Acerca del proyecto
Los objetivos del proyecto son: implementar una movilidad eficiente que conecte a las personas con los lugares que necesitan de forma rápida y confiable, que todo sin condición puedan acceder a un transporte, que se reduzca la contaminación y el impacto ambiental, mediante un servicio justo y equitativo para todos los usuarios y que las personas se puedan beneficiar de un transporte multimodal (autobuses, minibuses, metro y tren etc.).
Así como facilitar los viajes y contribuir al crecimiento sostenible de las ciudades, mejorar la calidad de vida de las personas, reducir la congestión y fomentar un desarrollo urbano.
El proyecto contempla carriles exclusivos para el uso de transporte público. Son vías segregadas de tráfico general, destinadas exclusivamente al uso de autobuses, trolebuses o tranvías, ya que reduce el tiempo de viaje.
